Título: ¿Cómo adaptar mi modelo de negocio a los nuevos cambios?
Ponente: M.Sc. Miguel Hernández Fernández
¨Si se vive entre codornices, es muy difícil volar como las águilas¨.
Los negocios se desarrollan en entornos de constantes cambios, por ello es de suma importancia que los emprendedores estén preparados para adaptarse a las nuevas reglas del juego cada vez que exista una variación. La identificación de factores adversos y positivos es un primer paso para evaluar la situación actual y futura del negocio y de las personas que lo integran. La visión del negocio conducirá a un mejor desempeño administrativo, social, técnico y de evaluación de mejoras. El ciclo de dirección es un pilar fundamental a la hora de asumir el cambio en el negocio y vale la pena preguntarse: ¿Por qué cambiar? ¿Para qué cambiar? ¿Cuál es la dirección del cambio?
En cuanto al concepto de modelo de negocio se puede decir que es el mecanismo por el cual un negocio busca generar ingresos y beneficios. También es conocido el modelo de negocio como diseño de negocio o diseño empresarial. De manera sencilla, es definir la forma de hacer negocios mediante el cual un emprendimiento genera su sustento de manera viable, es decir, cubre con sus ingresos, sus gastos y queda un remanente conocido como utilidad, lo cual permitirá disponer de recursos (entre ellos, dinero líquido) para mantener las operaciones diarias con normalidad.
Para la definición del modelo de negocio es necesario tener en cuenta varios elementos que lo integran, por ejemplo: la selección correcta de los clientes que se esperan que compren los bienes o servicios que oferta el negocio; qué bienes o servicios se ofertarán en el negocio y cuáles son sus diferencias entre ellos y con respecto a la competencia (para no vender más de lo mismo); cómo creas utilidad para tus clientes, o sea, qué beneficios tienen tus bienes o servicios; el mecanismo para conseguir clientes y retenerlos, es muy importante captar clientes pero más lo es la fidelización de estos pues genera más ingresos que si consigues nuevos clientes todos los días; cómo promocionas o publicitas sus bienes o servicios, mediante folletos, tarjeta de presentación, video promocional, lanzamientos de productos, posters entre otros formatos; cómo se definen cada una de las tareas diarias dentro del negocio, la improvisación solo es buena en casos de emergencia pero no se debe administrar un negocio en estado de emergencia todo el tiempo, esto conlleva a errores y gastos innecesarios que pueden conducir al fracaso; cómo estableces los beneficios sociales con respecto tanto a las personas que laboran en el negocios como las personas vulnerables que residen dentro del entorno en el cual actúa el negocio.
Una herramienta sencilla para la definición del modelo de negocio es el Modelo Canvas. En solo cinco minutos y en una hoja puedes tener reflejado tu modelo de negocio para materializar la idea de negocio que tienes pensado e iniciar con tu emprendimiento con paso firme. El modelo Canvas tiene algunos cuadros que te permiten definir claramente qué deseas hacer, por ejemplo: la propuesta de valor (¿Qué ofrecerás a tu segmento de clientes? ¿De qué forma resolverás sus problemas?); el segmento de clientes (¿A quién pretendes servir tu modelo de negocios?); los canales de comunicación (¿Cómo te conocerá y evaluará, y cómo decidirá, comprará y recibirá soporte post-venta tu segmento de clientes?); la relación con los clientes (¿Qué tipo de relación mantendrás con tu segmento de clientes?); las vías de ingresos (¿Cuál será la forma en que tu modelo pretende financiarse y obtener ingresos?); los recursos claves (¿Requieres de uno o más recursos clave para tu modelo de negocios?); las actividades claves (¿Qué actividades son claves para que tu modelo de negocios funcione?); los asociados claves (¿Quiénes serán los asociados clave en tu modelo de negocios?); y la estructura de costos (¿Cuál es tu estructura de costos? ¿Cuáles son los egresos más importantes de tu modelo de negocios?). De esta manera tendrás tu modelo de negocios para tu emprendimiento en poco tiempo.
Por otra parte, para poder mantenerse en el mercado es necesario adaptarse constantemente a los cambios que ocurren en él, pues la vida es dinámica y existen factores externos que ajenos a nuestra voluntad no se pueden controlar, solo hay que identificar cómo inciden en mi negocio y trazar una estrategia para aprovecharlos o disminuir su incidencia en dependencia del tipo de impacto (positivo o negativo). Para que un proceso de cambio pueda implementarse con éxito y sostenerse en el tiempo, es fundamental tener en cuenta el factor humano. Las personas deben confiar, estar motivadas y capacitadas, ya que el cambio es un proceso muy duro. La confianza es un requisito esencial para lograr un ambiente de trabajo agradable y de franca cooperación.
El proceso de cambio tienes tres etapas: Recolección de datos (determinación de la naturaleza y disponibilidad de los datos necesarios y de los métodos utilizables para su recolección dentro del negocio. Incluye técnicas y métodos para describir el sistema organizacional, las relaciones entre sus elementos y las maneras de identificar problemas y asuntos más importantes.), Diagnóstico empresarial (el análisis de datos tomados se pasa a su interpretación y diagnóstico. Se trata de identificar preocupaciones, problemas, sus consecuencias, establecer prioridades y objetivos), y Acción de intervención (se selecciona cuál es la intervención más adecuada para solucionar un problema particular organizacional. Esta no es la fase final del proceso de cambio, ya que este es continuo y una etapa capaz de facilitar el proceso sobre una base de continuidad).
Para el proceso del cambio se propone la utilización de la metodología ¨Viaje de las Ideas¨. Esta metodología consiste en siete pasos: Liderar la idea, Crear equipos de cambio, Comunicar e Involucrar, Arquitectura organizativa y procesos, Desarrollo organizativo, Movilizadores de personas, y El desarrollo de personas.
Liderar la idea considera crear la necesidad del cambio, crear comprensión y emociones positivas organizacionales, y asegurar una planificación creíble desde el punto de vista de resultados.
La idea en manos de un Equipo conseguirá hacerlas más grandes, pero sobre todo lo que queremos es liberar la colaboración necesaria para hacerla realidad.
Hasta que no esté en funcionamiento la Idea será lo que los demás perciban de ella. La información y los indicadores que informan sobre su avance, deben asegurarte que transmiten lo que tu Idea necesita en cada momento.
La mayoría de los negocios para convertirse en realidad necesitan que haya personas, que cambien sus tareas lo que finalmente supone cambiar procesos, tareas y a veces organigramas.
El «status quo» creencias, valores y formas de comportarse que tradicionalmente se asoció al éxito suele ser el enemigo de las nuevas Ideas, para evitar que las elimine, tendrás que gestionar parámetros de la Cultura, comprenderla y gestionarla.
Necesitas conocer las herramientas que actúan sobre las motivaciones y emociones de las personas, aquellas herramientas que permiten alinear las personas con tu Idea: retribución, reconocimiento, formación, gestión del conocimiento, competencias, etc.
Para cambiar la cultura y el saber de las organizaciones, es necesario cambiar el saber y las competencias y valores de las personas. El desarrollo personal es la principal herramienta del desarrollo organizativo.